"Por las calles voy dejando, algo que voy recogiendo: pedazos de vida mía, venidos desde muy lejos. Voy alado a la agonía, arrastrándome me veo, en el umbral, en el fundo, latente de nacimiento."
Miguel Hernández.
Hernández murió de tuberculosis con 32 años en la cárcel, en 1942. Pero lo fascinante es que comenzó a leer y a escribir con continuidad cuidando cabras, incluso lo dejó, fue al cole jesuita, se fue del colegió y volvió a las cabras. El silencio del campo la observación y movimienros de éstas fueron el eje de su visión poética. La naturaleza.
Miguel, sin duda, dignifica a los poetas. A mi me hubiese encantado ser controlador de agua de Las Catarratas del Níagra; creo que es el segundo mejor oficio de poetas tras ser padre y pastor.
Por las calles voy andando....
La Pedrera. Gaudí.
Eixample.
Gótico.
Maresme. Masnou.
Maresme.
Barceloneta.
San Gervasi.
Gótico.
Gótico. Raval.
Gótico.