Sábado y Domingo último finde, hemos recorrido mi niña y yo parte de esta Barcelona en primavera. En bici es otra ciudad distinta. La redescubres en cada esquina. Echas de menos no haberlo hecho antes por tener el culo pegado al coche.
Ir en bici con mi niña hace que su creciniento sea una fijeza. También aumentan los peligros.
Estando en casa a punto de dormir salta la noticia de que una conductora drogada y triplicando tasa de alcohol invade un carril contrario y barre a un grupo de ciclistas matando a dos e ingresando al resto.
Se te hiela la sangre. Aunque sabes que los imponderables son así.
La etimología de la palabra imponderable viene de 'pondus' en latín que es peso en castellano. O sea, en el peso de nuestra conciencia al conducir (ebrios o drogados) hay mucha causa de estos imponderables.
Piensa en esto al conducir así, que andar en bici es un disfrute.