miércoles, 19 de noviembre de 2014

Ricardo Porro y Las Escuelas Nacionales de Arte de Cubacán. Fotografiadas por Alberto Korda.

Estas fotos hechas por Alberto Korda, autor de la foto famosa del Che, a Las Escuelas casi acabadas de construir en 1964,  son quizás el único momento de su máximo esplendor pues justo allí comenzó su largo y agónico deterioro que en los últimos años han intentado detener.
Conocí de cerca a uno de  los tres arquitectos de Las Escuelas Nacionales de Arte en Cuba,  "Ricardo Porro," (los otros fueron Roberto Gottardi y Vitorio  Garatti) con quien tuve la suerte de charlar en La Habana varias veces, cuando retornó allí de visita en los años noventa. 
El novelista español Bruno Galindo nunca olvida la noche que lo llevé a una casa en la barriada residencial de Miramar, donde pudo escuchar una charla privada con Porro y otros arquitectos cubanos, Heriberto Duverger, Juanito Márquez,  y otros amigos suyos sobre la arquitectura de los cementerios en Egipto entre otros temas esenciales como su evocacion de José Lezama Lima por quien le pregunté personalmente.
He encontrado estas fotos de Korda  digitalizadas en una web de bibliotecas y quedé impactado por el aniversario redondo de 1964-2014.  
Estas Escuelas son de las pocas cosas buenas  atribuibles a Castro y al Che Guevara. Quienes conviertieron un campo de golf en Escuelas de arte. Gran metáfora para el mundo en ese momento que atrajo a muchos intelectuales  como Sartre, Garcia Márquez  y Mario Vargas  Llosa entre otros.
Luego se encargó Castro de hacer otra metáfora más cruel... Convertir un país en una dictadura.
También a Korda lo conocí en su casa junto al Río Almendares,  un tío más que simpático que nos hizo anécdotas, a mí y a Sarah Caron que iba conmigo, sobre el Che que publiqué en mi libro "Síndrome de Ulises," ed Linkgua 2004, BARCELONA, como nota de un texto.

Ese gobierno a cometido muchos desmanes, pero las Escuelas de Arte, conocidas como ISA, fueron una luz, y en la memoria de quienes pasaron por allí, parte de su vida.
Ricardo Porro.

5 comentarios:

  1. recuerdo bien esa visita a las ENA. esas bóvedas. los avisos para refugiarse en caso de ataque yanqui.
    y recuerdo el encuentro con Porro y los otros arquitectos esa noche en Miramar.
    BRUNO GALINDO.

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  2. En 2001 realizamos en Venezia una "jornada de la arquitectura cubana" con la presencia de los tres arquitectos que proyectaron el ENA, Ricardo Porro, Roberto Gottardi y Garatti. Estaba tambien el fotografo Gasparini del que hicimos una muestra.
    FRANCISCO Avicolli

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  3. Ademas estuvo John Loomis, que sobre el ENA ha escrito un lindo libro. En esa ocasion celebramos la obra de arquitectura mas importante que ha realizado la revolucion cubana.
    FRANCO Avicolli

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  4. La obra de arquitectura más importante que HA DEJADO INACABADA la Revolución Cubana... El libro de Eduardo Lu is Rodriguez sobre Arquitectura Cubana del Siglo XX, concluye con un artículo sobre la misma y con estas palabras. La construccioón de las Escuelas Nacionales nunca fue termindada, y poco después todas ellas comenzaron a ser criticadas como monumentos a un supuesto individualismo del artista, que las oponia a todo lo que debía ser la arquitectura de masas de la revolución. Tales acusaciones explican el estado de abandono y deterioro progresivo en que se encunetra le conjunto en la actualidad, a pesar de haber sido reconocido por muchos como la obra cumbre, aún no superada de la arquitectua cubana"... Eduardo Luis Rodríguez: LA HABANA: ARQUITECTURA DEL SIGLO XX. Ed. Blume. Barcelona Página 321. Y antes de que me acusen de ser primariamente anticastrista les recuerdo que estoy citando no un periodiquito de Miami sino un libro publicado por un profesor de la Universidad de La Habana ...
    Juan Carlos Castillon

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  5. Arsenio Rodríguez Quintana, Porro era un cubano universal, eso quiere decir, triunfar en el mundo sin cubaneo, y viceversa, ser cubano en el espiritu, algo que ya va desapareciendo porque nada salido de aquel engendro después del 59 puede alcanzar las alturas del refinamiento criollo y de su universalidad. Hablar con él era comprender (de un tiron) qué lejos esta uno de poder universalizar las sensaciones !
    Armando Valdés-Zamora

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