domingo, 1 de noviembre de 2015

Noticia: El filósofo francés Roland Barther, hecho bufanda de seda a 895€. Por Hermés.

Comencé a usar bufanda tarde. En 1999, año en que llegué a Europa. No obstante, desde que Odette Manchon me regaló la primera en París en la navidad de ese año, pasó a ser un complemento esencial en mi vida. No me detengo a cuestionar mis frivolidades, las asumo tal cual, y confieso que  Hermès a tenido una idea genial con un escritor, y me gusta hasta su astronómico precio.  Conozco incluso a la persona que sería capaz de regalarmela con tal de verme feliz. Pero de eso no va esta noticia...
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Noticia:
"Roland Barthes, el reputado teórico francés, habría cumplido 100 años en 2015. Para celebrarlo, la marca de artículos de lujo, Hermès, ha lanzado una bufanda de seda en un exclusivo lote de colección. El director artístico de la marca, Pierre-Alexis Dumas, mencionó durante el lanzamiento de la prenda que “una frase bien hecha, construida con palabras elegidas con precisión, es como una bufanda, hecha con materiales finamente tejidos; ambas dependen de la mano del artesano.” A esto agregó que “Una bufanda es algo muy íntimo: absorbe fragancia y tu aroma, y expresa la emoción y la memoria.”
La profesora de literatura francesa Christy Wampole escribió un texto para el New Yorker tratando de especular cuál habría sido el recibimiento del propio Barthes con respecto a su bufanda. Según ella, “la bufanda Barthes es un objeto particularmente legible y mitológico”, siempre utilizando la terminología del autor. “Frágil, costosa, y por ello para ser manejada con cuidado, como él manejó sus objetos de estudio.”
La seda de la bufanda es, además, un material especialmente bien elegido para conmemorar a Barthes, pues “es una fibra natural, exudada por una criatura viviente y por ello contiene algo de su vida en ella; su historia representa el encuentro entre Oriente y Occidente; y su invitación a ser tocada la coloca en la misma categoría que la piel humana.” Probablemente el aspecto más interesante es que “puede recordarnos el vínculo olvidado entre ‘texto’ y ‘textil.’ El texto del autor se vuelve textil.”
Presentación de Hermès París.

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