sábado, 9 de julio de 2011

Fernando Rojas y el tráfico ilegal de cadáveres exquisitos

A todos nos parecía raro que fuese tan fácil abandonar Cuba en los años noventa, si eras artista y pertenecías a la Asociación Hermanos Saíz que dirigía Fernando Rojas quien creó un mecanismo express de salida del país para todos los que escribían, pintaban o fueran músicos, coordinado por el Ministerio de Cultura y con una carta de invitación de una institución cultural extranjera, salías sin pagar en dólares los trámites del permiso de salida (150$), pasaporte (50$) y otras gestiones de visado que encarecían mucho a quienes salían del país por turismo o invitaciones familiares, ya que la remuneración en la isla por trabajo era en moneda nacional y no divisas convertibles. El de artista-escritor  fue mi mecanismo de salida hacia Burdeos, Francia, sé de lo que hablo.
Lo curioso de todo esto, es que Fernando Rojas, ahora como viceministro de Cultura, dice que la obra cultural de valor de Cabrera Infante, Lydia Cabrera, Celia Cruz, Reinaldo Arenas y muchos otros artistas cubanos que han muerto en el exterior y cuyas posiciones en vida hacían evidentes sus discrepancias con el gobierno, pertenece a la Revolución. Precisamente lo dice alguien que nunca se atrevió a hacer nada cuando éstos estaban vivos, influir -incluso aunque fueran discrepantes- para que se les hicieran homenajes en ausencia,  que todos sus libros estuvieran al alcance en las bibliotecas para demostrarles que aunque contrarios seguían siendo cubanos, ¿a qué viene esta absurda necrofilia artística y tráfico ilegal de cadáveres ahora que no están?¿Repararán todas las casas donde vivió Cabrera Infante y harán un tour literario de sus novelas por La Habana?  ¿Pondrán en la casa natal de José Martí, que allí también nació y vivió el bajista cubano Israel López Cacháo creador del mambo y ganador de varios Grammys? ¿Harán un tour por el parque Lenin donde se escondió Reinaldo Arenas huyendo de la policía? o ¿en el próximo Cubadiscos se dedicarán conferencias y versiones a toda la obra de Celia Cruz a quien no dejaron regresar a La Habana, por reaccionaria, para asistir al entierro de su madre? Deberían invitar a  Gloria y Emilio Estefan que aún siguen vivos y deberían radiar su música en las radios y la tele cubana.  Sin olvidar dedicar el festival de cine a Andy García, el actor vivo cubano más internacional, pero, a éstos vivos, no, según palabras de Fernando Rojas "La Revolución solo renuncia a los que sean incorregiblemente reaccionarios, a  los que sean incorregiblemente contrarrevolucionarios", es decir, el muerto al hoyo y el vivo...
Más que traficar con cadáveres exquisitos de la cultura cubana debían hacer gestiones para que todos los cubanos, no artistas y artistas, entren y salgan libremente con el pasaporte y la vida ciudadana que eligieron, canten, toquen y publiquen donde elijan. Borges no es menos argentino porque está enterrado en Ginebra, muchos menos Cortázar, en París, solo cuentan con el respeto sincero en su país por toda su obra y no según convenga al gobierno de turno.











foto collage: Guillermo Cabrera Infante, Celia Cruz, abajo
Reinaldo Arenas, Lydia Cabrera y Cacháo.

3 comentarios:

  1. A Miguel Baluja Rodriguez le gusta esto.

    ResponderEliminar
  2. Rojo entre los rojos, con visión daltónica. Arsenio lo encara muy bien. La cultura cubana es una sola a pesar de los malintencionados.
    Maria Cristina Fernández

    ResponderEliminar
  3. A Luis de la Cruz le gusta esto.

    ResponderEliminar