La fotógrafa Colita capturó el pulso de la vida de artistas del flamenco, Nova Cançó Catalana, y también de políticos, escritores, pintores, escultores, intérpretes,...desde los años 60, y casi hasta principios de este siglo. No obstante, esta foto tiene una lectura simbólica del Eros notable. Y contrasta con la opinión generalizada de que la Gauche Divine eran un grupo de pijos ricos que montaron editoriales y se forraron. No quiere decir que no lo fueron, pero también eran un grupo de jóvenes que se dejaron contaminar de una época de libertad en tiempos de la dictadura franquista, aunque ya en decadencia. Banalizar a estos jóvenes catalanes de clase media alta que cambiaron para siempre el sentido de la literatura Latinoamérica es un error, como le leído en muchas páginas.
La foto.
La morena lleva bragas blancas sin medias, la rubia lleva bragas negras, además de un lápiz en la boca como metáfora-juego de una supuesta felación entre las piernas del editor que está sentado detrás. Ambas llevan botas negras impecables, lo que hace evidente que la época era invierno y todos debían escuchar en sus fiestas a Jane Birkin y Serge Gainsbourg -con su 69 annee erotique.