■Acabo de ver la última peli de Michael Moore... Sobre las matanzas en las escuelas, sobre Donald Trump, sobre la probreza en Estados Unidos, sobre la Democracia, sobre el despotismo, sobre la política y sobre lo que somos. Hay que ser muy idiota para no buscar esta peli y no verla.■
Nota en mi cuenta de Instagram cuando se apagó la sala
Excelente. Reflexiva. Brutal.
Retrato de la política en occidente y sus déspotas desde Hitler hasta Trump. Con este último hasta se culpa hasta sí mismo por tomarse en broma a alguien que iba muy serio contra muchos derechos y libertades el cual califica de misogeno, racista, inculto, tirano, embustero y manipulador. Ojo que tiene claro que Donald no cayó del cielo, todos los presidentes anteriores contribuyeron a que este apareciera en escena. Todos, republicanos como Bush que no soporta a Trump, y demócratas como Obama, han creado este muñeco infame y terrorífico por el poder con que hoy cuenta en sus manos. A mi lo único que no me gusta de su retrato de Trump es lo que sugiere de la relación padre e hija. Ahora el paralelismo que hace de Alemania y Estados Unidos cuando Hitler y Trump llegan al poder es un acierto en el montaje y en el uso de la historia, pues entrevista a juristas muy ancianos que estuvieron en Nuremberg.
Además, de Trump este documental se centra en Michigan, ciudad dónde nació Moore, y como un gobernador republicano sabiendo de los altos indices de plomo en el agua, por el que han muerto mucha gente y más de 100 mil niños tienen plomo en la sangre, engaña a la gente a conciencia y manipula análisis de la sangre en los niños para decir que los niveles de plomo en sangre eran normales.
Asociación Nacional del Rifle (ANR)
Este señor me cuenta sin pelos en la lengua lo que casi nadie cuenta de Estados Unidos. Su lucha personal contra el disparate que significa que esa población tenga nada menos que 160 millones de armas en manos de sus ciudadanos, que dependiendo del estado metal de unos y otros alguien va con una arma a una escuela, una sinagoga o simplemente la calle y dispare.
Hace un seguimiento entusiasta de los jóvenes que sobrevivieron a la matanza de 17 alumnos de la escuela en Parklan, en Florida, que lograron movilizar a casi todo el país y cientos de millones de gentes en todo el mundo para llamar la atención de políticos y gobiernos sobre el disparate de portar armas sin sentido alguno.
Aquí dos estadounidenses de origen cubano de criterios antagónicos centran la atención del documental:
Uno es Ted Cruz, quien en un debate con uno de los adolescentes sobrevivientes a la matanza, David Hogg, este le pregunta ante un auditorio repleto, ¿te comprometes a no usar dinero de la ANR en tu campaña?, y Ted Cruz hace un ridículo espantoso, pues no tiene valor ni cojones de decir que no. Y tartamudea de forma cagalitrosa y genial.
La otra es Emma Gonzalez, la chica de 18 años que hoy es el centro o el rostro más visible de la lucha contra las armas y su control en Estados Unidos, pone varios fragmentos de sus discursos y centra de alguna manera su esperanza de que estos jóvenes cambien para bien la visión de las armas en ese país.
Michael Moore también se muestra esperanzado en dos candidatas jóvenes al congreso, que van desde una musulmana hasta una puertoriqueña, que en el momento del documental, que se estrenó en EE.UU un mes antes de las elecciones al Congreso 6 de sep 2018, hacían campaña, y ya ambas son congresistas.
Una Alexandria Ocasio-Cortez, de 29 años, la congresista más joven y mujer en la historia del Congreso; y la otra, la primera musulmana Rashida Tlaib (de origen palestino) en el congreso americano ambas por el partido demócrata, ambas hablan del asistencia médica universal y gratuita, y de la educación gratuita entre otras cosas muy sociales que viven desde su propia piel.
Los dos aparecen en el documental muy cerca de la gente que le terminó votando yendo puerta por puerta.
El documental es una autocrítica severa a todo el pueblo de EE, UU, se agradece saber que hay gente que no tiene miedo de ser juzgado por querer un país diferente fuera de los tópicos. Pone su país en el lugar que está sin engaños. Con un sistema de salud solo para ricos, y una aberración por las armas que da miedo.
Este documental yo lo pondría de forma obligada y gratuita en muchas escuelas. Para debatirlo. Pues cierra muchos ciclos sociales que ya había abierto en sus anteriores films.
