Raúl Ciro se suicidó, músico y compositor cubano. Aquí dos fotos
que conservo de él de cuando leíamos poemas y cantábamos en 13 y 8, esa Casa en
el Vedado, que fue la génesis del CD Habana Oculta, donde Raúl Ciro y
Frómeta participaron como grupo Superávit. También de Habana Abierta, de Athanai Castro Gómez de Gema y Pavel Urkiza. Raúl se suicidó un día después de un aniversario de nacimiento de Kurt Donald Cobain nació un 20 de febrero, pero de 1967que se suicidió en 1994. Quién marcó esa generación de los años noventa en Cuba como el rock argentino.
Casi todos los que fuimos llamados a casa de Pável para la primera reunión habíamos integrado la peña de 13 y 8, con excepción de Pepe del Valle, aunque él también había cantado allí alguna vez. Además de Pepe, fuimos Andy Villalón, Vanito Caballero, Alejandro Gutiérrez, Carlos Santos, el dúo Superávit (formado por Alejandro Frómeta y Raúl Ciro), Luis Alberto Barbería (que estaba viviendo en Suiza hacía uno o 2 años y regresó de visita a la Habana a tiempo para participar), José Luis Medina y yo.
Boris Larramendi. 2016, en su blog personal.
Raúl desde que lo conocí daba una
sensación de fragilidad, por su voz que nada tenía que ver con su carácter. Era
de una nobleza contundente y sus dúos con Frómeta son un equilibro exquisito
que llegó a la perfección cuando se incorporó Carlos y grabaron Verde Limón.
Sobre Verde Limón Raúl Ciro dejó este comentario:
Coño, Joaquín, con el corazón…, desde el incondicional respeto y el agradecimiento que mereces. Si hubieses usado un pseudónimo, habría estado volao, aparentaríamos que alguien lejos de “los de siempre” se ocupa de este apartado. Ojalá pasados otros cincuenta años hayamos hecho algo a la altura de este fonograma, y que igual llame tanto la atención de casi todos.
Honestamente para mí, las sesiones de grabación del Verde Melón fueron frustrantes, muy lejos de mi ideal de disfrute en este campo tan soñado. Una de las cosas que recuerdo con más amor, fue cuando Emilo, Félix y yo pusimos las bases de Villa de París, entonces, contrario a toda la filosofía de trabajo en esa ocasión, no usamos claqueta, nos seguimos los tres. Alfredito dijo algo así como que, había sido algo único el momento, muy especial, casi mágico. Yo estaba metido en una cabina insonorizada, ellos dos, batería y bajo, estaban fuera, nos mantuvimos muy bien comunicados por auriculares, guiándonos todos por el espíritu de mi interpretación en directo; más tarde descartamos ese track de voz y guitarra, conservando la base de bajo y batería. En otras sesiones se pusieron guitarras, voces, las maravillosas cuerdas y un corno francés, creo. No me gusta mi voz en este tema, en varios; a ratos aprecio que las bases de tiempo están alteradas, no son adecuadas, y esto dificulta muchísimo todo, como que mata el alma…
Ver a Alejandro Frómeta dirigir, sobre todo las sesiones de grabación de cuerdas, me llena hoy aun de mucho orgullo, lindando curiosamente con lo paternohermanoide.
Un dato más, y les dejo esta suerte de vídeo, desde el año 1991, hasta casi el 94, estuve trabajando en el ICRT, estos estudios tienen mucha carga para mí. En los primeros años hasta pasé la aspiradora recogiendo el polvo. También hice muy buenos amigos: Trujillo; El Chino Yong Cong; Micha y Robertico, mi compañero auxiliar de limpieza con diploma de mecánico de aviación. Su especialidad…, el modelo de avión, nunca llegó a Cuba de la URSS. Por suerte nos conocimos entonces.
Un abrazo para todas.
Raúl Ciro
Blog eforyatochacopia/ 2008/08/
Sobre Verde Limón Raúl Ciro dejó este comentario:
Coño, Joaquín, con el corazón…, desde el incondicional respeto y el agradecimiento que mereces. Si hubieses usado un pseudónimo, habría estado volao, aparentaríamos que alguien lejos de “los de siempre” se ocupa de este apartado. Ojalá pasados otros cincuenta años hayamos hecho algo a la altura de este fonograma, y que igual llame tanto la atención de casi todos.
Honestamente para mí, las sesiones de grabación del Verde Melón fueron frustrantes, muy lejos de mi ideal de disfrute en este campo tan soñado. Una de las cosas que recuerdo con más amor, fue cuando Emilo, Félix y yo pusimos las bases de Villa de París, entonces, contrario a toda la filosofía de trabajo en esa ocasión, no usamos claqueta, nos seguimos los tres. Alfredito dijo algo así como que, había sido algo único el momento, muy especial, casi mágico. Yo estaba metido en una cabina insonorizada, ellos dos, batería y bajo, estaban fuera, nos mantuvimos muy bien comunicados por auriculares, guiándonos todos por el espíritu de mi interpretación en directo; más tarde descartamos ese track de voz y guitarra, conservando la base de bajo y batería. En otras sesiones se pusieron guitarras, voces, las maravillosas cuerdas y un corno francés, creo. No me gusta mi voz en este tema, en varios; a ratos aprecio que las bases de tiempo están alteradas, no son adecuadas, y esto dificulta muchísimo todo, como que mata el alma…
Ver a Alejandro Frómeta dirigir, sobre todo las sesiones de grabación de cuerdas, me llena hoy aun de mucho orgullo, lindando curiosamente con lo paternohermanoide.
Un dato más, y les dejo esta suerte de vídeo, desde el año 1991, hasta casi el 94, estuve trabajando en el ICRT, estos estudios tienen mucha carga para mí. En los primeros años hasta pasé la aspiradora recogiendo el polvo. También hice muy buenos amigos: Trujillo; El Chino Yong Cong; Micha y Robertico, mi compañero auxiliar de limpieza con diploma de mecánico de aviación. Su especialidad…, el modelo de avión, nunca llegó a Cuba de la URSS. Por suerte nos conocimos entonces.
Un abrazo para todas.
Raúl Ciro
Blog eforyatochacopia/ 2008/08/
Yo respeto que Raúl haya elegido su final, no por ser mi amigo durante un tiempo muy importante de mi formación literaria y cultural en Cuba en torno a 13 y 8, sino porque, he respetado siempre a los suicidas, empezando por Virginia Woolf. Quizás en su mejor canción Villa de París, fue premonitoria. Villa de París, era el nombre del Globo de Matías Pérez, un portugues que salió en globo de la Habana y desapareció.
En mi libro "Síndrome de Ulises," Barcelona, 2004, tengo dos poemas a dos suicidas, uno es a un poeta cubano, otro un escritor japonés.
En mi libro "Síndrome de Ulises," Barcelona, 2004, tengo dos poemas a dos suicidas, uno es a un poeta cubano, otro un escritor japonés.
Como a Raúl Ciro lo conocí en 13
y 8, creo fue Boris Larramendi quien nos presentó me quiero despedir de
él con este poema mío a otro suicida...
El hombre tiene plena conciencia de que va a morir,
En cambio, nunca asume ese evento
Solo los suicidas como Ozamu Dazai
(escritor japonés que se arrojó a las
aguas del acueducto de Tokio)
conocen el límite
lo que está escrito al final
del camino
La Cifra.
Pag. 78. Libro Síndrome de Ulises.
Editorial Linkgua Barcelona 2004.■
Seguro ahora sí descansas en paz, Raúl
Ciro.
13 y 8 en el Vedado. Foto Fidel Moreno
Nota de Supeávit
Raúl Ciro
Fue fundado en La Habana, Cuba en 1991, integrado por Raúl Ciro Hernández Gómez y Alejandro Frómeta, voces y guitarras. Para sus presentaciones en conciertos incluyeron a:
- Carlos Puig, (teclados)
- Manuel Orza, (bajo)
- Pedro Pablo Pedroso, (violín y teclados)
- Isaac Capetillo, (trompeta)
- Norberto Rodríguez, (guitarra)
- Eduardo Espasande, (batería)
En septiembre de 1991 logran grabar un demo titulado "Dos por Dos", contentivo de tres canciones:"Villa de París", "Público mío" y la que da nombre a la cinta demostrativa, es decir, "Dos por dos."
Este material da muestra de un acercamiento a los parámetros que rigen el rock acústico. El empleo de guitarras con cuerdas de acero y el uso de la harmónica –ejecutada por Raúl Ciro– por momentos trae un aliento de música folk en un contexto de sonoridad country. De igual modo, la forma de manejar las voces le hace a uno evocar las influencias del rock nacional argentino y en especial de Sui Géneris, en particular los trabajos hechos por dicha formación en la etapa previa a su disco Pequeñas anécdotas sobre las Instituciones.
En 1992 graban su segundo demo, denominado "No te dejabas ver", en el que sobresale la pieza nombrada "Éxito", probablemente el tema que mejor sintetiza el estilo de Superávit en lo que sería su primera etapa, período finalizado con una tercera cinta demostrativa bajo el título de "La otra cara" y que vería la luz en 1994. En 1995, en una nueva etapa de trabajo, integran una banda con:
- Carlos Santos, (voz, compositor y guitarra eléctrica)
- Alfredo Hernández, (percusión)
- Emilio Veitía, (batería)
- Yalica Jo Gazán, (cello)
- Félix Lorenzo, (bajo)
- Mario Fernández, (violín)
Sobre el disco Verde melón, opinión de Juan Formell:
«Antes de salir al mercadome brindaron la oportunidad de escuchar este disco y su ambiente sonoro enseguida me trasladó al pop y al rock de los sesenta y ochenta con un toque adicional y especial de nuestra música cubana. Me llegó una sonoridad muy original que, a mí, no se me pareció a nada; 176 / Superávit-Superación era un ejemplo de la mezcla que somos. Sentí salsa con pop, rock con batá y la fusión de las cuerdas con las guitarras eléctricas o las acústicas, buscando un sonido que pudiera ser country o el de nuestras charangas quizás, confieso que el sonido de Superávit me atrapó sin remedio.»
Extraído de Ecured.
Borris Larramendi y Raúl Ciro