páginas vistas

viernes, 19 de junio de 2015

¡Me han hecho dos retratos memorables! Soph IE e Iván..

Soph IE me ha hecho -sin dudas-, un retrato que dudará  mucho tiempo en mi memoria. Por ser un perfil. Un trozo de mí con una luz que yo no puedo ver y sus ojos captan ayudada por su "cullmann magic chestpod," un soporte de su cámara que es un miembro de sí misma que fija su creatividad...
"A veces en las tardes una cara / nos mira desde el fondo de un espejo;  el arte debe ser como ese espejo / que nos revela nuestra propia cara. "
Nunca, que yo recuerde, alguien me había captado en el éxtasis público de escuchar música tocada en vivo.
La rumba de cajón tocada por Carlos Sarduy y Julio Carbonell; Yenys a mí lado cantando y haciendo percusión menor, y una iluminaba copa azul, hicieron lo demás. 
Esa noche escribí: "Frijoles Negros fue, el solar de diseño más fino de Barcelona y el mundo."
 Yo estaba en el Eixample barcelonés pero mi cabeza de exiliado y Ulises nostálgico que soy, estaba del otro lado del mar recordando otras noches de rumba en una isla....

"Cuentan que Ulises, harto de prodigios, 
lloró de amor al divisar su Itaca 
verde y humilde. El arte es esa Itaca.
de verde eternidad, no de prodigios."
Conforme y feliz con esa foto, no esperaba que otro fotógrafo de las noches musicales barcelonesas,  Iván Barrios; con quien comparto portada del CD "Havàname,"  me  hacia el frente (el complemento de la imagen de Soph IE) otra foto del mismo instante. De otra creatividad y ambiente.
Son dos imágenes que arman un cuerpo, que vive, una vida que arrastra por Europa,  y otra vida que disfruta de la música que está hecha para la vida, o sea, mis oídos. 
Son las mitades de un poetastro feliz de tener amigos con talento creativo para dar una imagen de mí, diferente...
"La felicidad también es la melancolía
que en ese rostro existe,
cuando te quiere decir que sólo por él
es bueno estar triste…"


Foto de Soph IE.
Abajo
Foto de Iván Barrios.