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martes, 4 de abril de 2017

Reseña de peli: Demain tout commence: Mañana todo comienza.

Ayer vimos juntos "Mañana empieza todo,"la peli trata sobre "Samuel,  es un joven soltero y conquistador que vive en la costa francesa. Un día una antigua aventura se presenta con un bebé en brazos, le comunica que es su hija y desaparece. Incapaz de llevar una vida con un bebé intenta encontrar a la madre sin éxito. Pasa el tiempo y mientras la niña va creciendo llevan una vida divertida y maravillosa. 8 años más tarde la madre regresa para recuperar a su hija."
Samuel es tan negro como yo, su niña Gloria tan mulata como mi hija. El amor de Samuel por su hija es tal y tan natural y tan divertido y tan mimético al nuestro,  que cuando lo intentan separar a nivel judicial en la peli (en nuestra vida real ella mi niña también quiere más tiempo conmigo) Maya ha llorado desconsoladamente de una manera que nunca la había visto. Contagió a Cecy que había ido con nosotros también y él padre viaja mucho por trabajo. 
El papel que hace Omar Sy, actor extraordinario y francés, pareciera que es padre y no lo es. Te lo crees de tal manera que cambiarías toda tu vida por ser como él. No es mi caso. Creo que respecto al amor que él da a su hija no me da lecciones aunque sí lágrimas. Gran película aunque mi niña llorara tanto; me gustó que la entendiera así al verse reflejada en pantalla.  Por suerte, comienza a entender que lo que nos damos al estar juntos tiene un valor más allá de los acuernds judiciales y las demandas.  
El amor no entiene de papeles de este tipo. Si uno pide desde el inicio custodia compartida ante el juzgado y el otro no, es imposible esconderse. 
No me escondo nunca a nivel sentimental. Y un día publico un poema sobre desamor y otro si me apetece hablar como hoy  de querer tener más tiempo a mi hija,  sería hipócrita no hacerlo. Sería idiota si digo que hubo momentos en el cine de su relación padre e hija que parecía que me habían seguido con una cámara por toda Europa con mi hija...

Así comienzan las memorias de un padre que solo tiene a su hija (entre semana) un día; y por ende, la lleva al cole los jueves. Día de júpiter. Lo de padre es una realidad, la voluntad de quien impone este régimen cree que limita tu cariño a un solo día, a unas horas. No sabe que el amor concentrado tiene la relatividad en su ADN. Y lo que das en ese tiempo vale la semana con ella.
Verla perderse en la primavera de su vida hacia el cole andado con una amiga la hace cada vez mayor. Si además, es primavera, te hace feliz ver perderse la luz entre la luz.