páginas vistas

lunes, 28 de mayo de 2018

María Llarás en bañador mira y espera

La poeta y amiga María Llaras no conoce a Edward Hopper cuando cuelga esta imagen en su muro.  Es demasiado joven para saber en qué estaba pensando aquella mujer en bañador como ella sentada en una cama.
María mira a quién la retrata. La mujer de Hopper está tan triste que ni mira a quien la retrata y tampoco sonríe.
Aunque Plotino ya había escrito que existir es ser retratado.
María quiere existir a través del retrato en la red. La anónima de Hopper le da igual su existencia, pues sabe que lo que lee o que acaba de leer no modifica su futuro.

María Llaras sabe que esta foto en la red es una opción de futuro, dependiendo de quién mire por azar su cuerpo, sujeto a los límites de ese bañador rojo.
La anónima de Hopper también sentada en la esquina de una cama y con casi todo recogido y las maletas hechas no quiere irse.
En cambio 
María entre su bañador, su sonrisa y la sombra 
intenta una invitación virtual a su intimidad. 


Vete de mí: un tango llevado a bolero culpa de Bola de Nieve

Bola hizo suya esta pieza "Vete de mi". Superó  en mi criterio, a Expósito y a quienes lo antecedieron. Incluso supera de largo a su compatriota Bebo Valdés y el 'Cigala.  
Bola cogió un tango típico argentino, y lo devolvió a su tierra natal, o sea a Cuba, que fue donde nació su sincopa entre esclavos y música europea antes de irse en barco por toda América a buscar nuevas influencias.

Nota de historia musical del tango.

(Tango: El lugar de reunión de los esclavos, tanto en África como en Cuba, era llamado tango. Diccionario de Pichardo ed. Cuba) El Diccionario de la RAE, en su edición de 1899, definía al tango como una "fiesta y danza de negros o de gente del pueblo, en América" y también como segunda acepción: "la música de esa danza". Es interesante notar que el diccionario le da al término un falso origen latino: dice que proviene del latín, que es tangir más bien sería tángere, de donde proviene "tañir" y de ahí ego tango: "yo taño".

■Tú, que llenas toda mi alegría y juventud
Y ves fantasmas en las noches de trasluz. 
Y oyes el canto perfumado del azul. 
Vete de mi... 
No te detengas a mirar. 
Las ramas muertas del rosal.
 Que se marchitan sin dar flor.
 Mira el paisaje del amor.
Que es la razón para soñar y amar...
 Yo, que ya he luchando contra toda la maldad.
Tengo las manos tan desechas de apretar,
Que ni te pueden sujetar. 
Vete de mi... Seré en tu vida lo mejor.
 De la neblina del ayer. 
Cuando me llegues a olvidar.
Como es mejor el verso aquel.
Que no podemos recordar.■


El atonalismo con que la toca y canta Bola, su susurro enojado por la pérdida. Los silencios y las entradas y matices tienen una forma de entrarte en el corazón que todas las demás versiones parecen de cartón. Si las empujas se caen. Y escuchándola uno recuerda por qué no le dijo alguna que otra "vete de mí, ya."
Ya lo he digo en otras ocasiones. Cigala no me gusta, salvo la difusión que ha hecho de algunas de las canciones que aparecen en 'Lágrimas Negras;'  y ponerlas de moda ante tanta mediocridad, mucho peor de lo que él hace, que no lo es, a mi me gustan otros flamencos.