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martes, 19 de octubre de 2010

Unos labios en el metro de Barcelona


El metro se comporta como una cascada que en lugar de agua, va cayendo al vacío mientras avanza por debajo de la ciudad. No obstante, antes de llegar a la parte del Mediterráneo que hizo famoso Serrat en una canción, todas las líneas de metro tienen un pretexto para girar en algún sentido, quizás por la imposibilidad de poder respirar bajo el agua.  Quien hizo el metro quizá no supiera que los esclavos de la colonia francesa de Saint Domingue, creían que para ir al paraíso había que bajar al fondo del mar, donde estaba Guinea.
La línea amarilla gira a la izquierda, y uno descubre una ciudad nueva que preside la Torre Agbar que aumenta su erotismo al iluminarse de azul en las noches. Si bajas desde el barrio de Gràcia en la línea verde, el giro es a la derecha por la parte gótica de la ciudad. Esta línea a pesar de ir bajo la falda del Passeig de Gràcia, modernista en toda su extensión, también
es incapaz de entrar al mar.
Puedo demostrar que yo no giro a la derecha ni a la izquierda. Mi cuerpo a veces gira por inercia en algún sentido, mientras yo siento que penetro al mar en línea recta salvaguardado por la estatua de Cristóbal Colón al final de las Ramblas. El brazo estirado de Colón señala metafóricamente, un punto autobiográfico de su pasado, El Caribe, que coincide con el mío, antecedente que me ayuda a sobrevivir a la voluntad de crear otro yo.
El metro es un cráneo de luz de la ciudad; y  sus diferentes líneas o rutas, son las ideas que hacen que la ciudad no sea la misma, para cada cuerpo que viaje por ellas.
La chica  que va sentada a mi lado en el metro, rozando su pierna desnuda con la mía, se pone crema en los labios. No puedo asegurar que tenga deseos de besar, pero algo recuerda la memoria de su lengua cuando termina la trayectoria al final de sus labios mientras juega con  la foto de su chico en su  iPhone 4G, y pasa o repasa la lengua rosada por sus labios que seguro ahora saben a fresa. 
Su rostro refleja una leve sonrisa mientras amplía y disminuye otra foto en su pantalla táctil.










foto: arkolano

1 comentario:

  1. Me gusto muchisimo !!!!
    Y yo tb quiero un metro en Miami, pa'no tener q manejar :)

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