Tengo que decir que las primeras veces que vi este edificio yendo a San Feliú de Llobregat, a casa de una amiga entrañable, no supe decir si me gustaba, o sencillamente me llamaba la atención. Hoy con el tiempo admito que me gusta por su metáfora de parecer un hormiguero invertido. Un hormiguero que comenzó como proyecto en 1970 y terminó finalmente en 1995.
No sé en la mañana, pero verlo a esta hora que cae la tarde cuando voy a echar combustible cerca, el ladrillo rojo arcilloso y la luz del otoño hacen una comunión perfecta. Que me obliga a bajarme del coche y hacerle la foto que ilustra el post.
"El escritor Goytisolo, antiguo vecino de este inmueble, publicó un poema que hacía referencia al Walden.
Igual que en cueva o castillo mágico
todo iba a cambiar en aquel sitio,
todo iba a cambiar porque en el sueño
las cosas imposibles ocurren fácilmente.Goytisolo
Hummm pues yo tampoco sé si me gusta, pero justo al leer tu percepción de ...hormiguero invertido... me hace más pensar que no. Aunque no dejo de reconocer que se hace notar mucho en la distancia.
ResponderEliminarADRIANA CaÑizares
NO SÉ QUÉ DECIR ACERCA DE ESE EDIFICIO
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