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jueves, 14 de noviembre de 2013

Un piso compartido en la calle Pintor Fortuny. Barcelona



Este portal N' 32 en la calle Pintor Fortuny, no significa nada para la mayoría de los mortales que pasen por sus bajos, no obstante,  para mí significó un  aterrizaje diferente en la ciudad. Por su centralidad en Barcelona. También fue la  primera vez que compartí un piso, donde la nevera tiene una frontera invisible que todos sabemos que existe; donde haces el amor reconociendo los pasos de la otra pareja que va al baño y debes detenerte según el momento donde te encuentres. Donde las primeras veces que vienen amigos o invitados de los "otros" tu te sientes extraño si quieres ir al salón...  Todo es diferente si nunca has compartido, pero vivir la intimidad cotidiana te crea vínculos que transcienden más allá de las palabras y terminas en una otra/amistad com/partida.
Justo en esa  habitación  escribí casi todos mis poemas del libro Síndrome de Ulises, hoy recuerdo un poema que no incluí en el libro, probablemente no nos gustó al editor, Radamés Molina y a mí, donde jugaba con la idea de com- y -partir, que fonéneticamente se parece al com, de venir,  en inglés, y el partir del castellano. Una contradicción que no supe resolver en aquel instante y reflejaba mi desconocimiento por nunca haber compartido mi intimidad  salvo con mi familia.
Fue el lugar donde empecé a tener nostalgia, no del lugar donde había nacido, sino de Sevilla, donde había vivido durante dos años a mi llegada a Europa, luego de haber aterrizado en noviembre de 1999, en París, mi cuna iniciática y europea un mes de noviembre como este, un otoño que está muy lejos.
Carrer Pintor Fortuny, es  en realidad el homenaje al pintor catalán Marià Fortuny i Marsal,  (Reus, 1838 – Roma, 1874) considerado el mejor pintor del siglo XIX español detrás de Goya, le tengo un cariño especial. Por eso no me resisto a mirar este portal y seguir andando,  casi siempre me detengo cada vez que paso cerca, esta vez hasta le escribo un post mientras sigo para captar la esencia de una Milonga en la misma calle, una milonga llena de gentes de todas partes que tienen un objetivo común, bailar Tango como eje universal de sus cuerpos..., seguro mi siguiente post.
a Radamés Molina, Lisset Lemus, Ubaldo Huerta, Wendy Navarro, Direlia, Ernesto Busto, César, Ferrer y todos los que vivieron o pasaron  o bailaron en las fiestas no universitarias de este piso pero si muy nostálgicas con un país clavado en la memoria de todos y otra ciudad gustosa y literaria donde vivimos.

    Direlia que vivió aquí casi acaba el post desde el mismo portal, no sabes si te invita a venir (com) o        alguien de su vida parte, o sea se va...
Wendy Navarro se despidió con esta foto de su estancia en Pintor Fortuny 32, el día que lo abandonó.





Otros inquilinos no menos importantes de este piso a partir del 2005...por Wendy Navarro:  Vanessa Badagliacca, (italiana, doctora en historia del arte), fue realmente con la que entré al piso, ella y yo solitas, apenas unos meses después ella se iba y llegó: Alba Gómez (colombia) que estuvo casi hasta el final. De los primeros tiempos también estuvo un año y algo Stefan (alemán), Raquel Bazán (asturias), luego vinieron Laura (inglaterra), Celine Filippi (Francia), (Nadia (alemania), Direlia Lazo, y hay un par mas que solo se quedaron unos meses..! Incluir a Alba Martín (catalana), casi como si viviera allí desde el principio, amiga de todas, casi una hermana..

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