Quien cortó y organizó esta leña no
sabe de diseño, ni es experto en arte conceptual. Solo ha vivido toda su
vida en una Masiá de la Cerdenya, Lleida, donde el invierno es vida cotidiana
en este paisaje medieval.
No sabe de arte, ni arquitectura,
este Pagés amable que me ve escribiendo al amanecer muy cerca de él, que ya
lleva horas trabajando en silencio. Pero esto, es arte por arte. Al menos para mí
que piensa en el color del fuego que quemará toda esta manera solo para
mantener la piel...
No hay comentarios:
Publicar un comentario