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viernes, 11 de agosto de 2017

Vivo en una cueva llena de libros.

Vivo en una cueva llena de libros.

Vivo en una cueva llena de libros. Podría vivir mejor pero no sería libre.  Tiene un coste alto la emoción personal cuando decides ser libre en las ideas que generas. Y no en la piel con que está forrado tu cuerpo.
En esta cueva he sido feliz con quienes han pasado levemente, o se han quedado un  tiempo.
No pidas ser como yo. No pidas ser Kafka que vivió en un espacio así en el Callejon del Oro en Praga. 
Sé como tu cuerpo quieres que seas. Los libros no se imponen, eligen un ser que porta un cuerpo.

Tengo dos colcoches. Los vecinos se han quejado por el ruido de la felicidad cuando una piel me invade. 
Aunque a veces estoy solo y escribo y tengo el mismo  éxtasis tras un buen texto leído por cinco mil personas en un solo día ....y los vecinos no se quejan.
Aunque yo grito igual de felicidad y sudo exactamente lo mismo.
Con dolor -es cierto-
A veces el gusano se convierte en mariposa.

Vivo en una cueva llena de libros y música. Tengo motivos para creer que la atmósfera es atractiva. Tengo motivos para creer...