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miércoles, 30 de mayo de 2018

Patti Cakes, un filme extraordinario.

Me cuesta pensar que veré una peli mejor que PATTI CAKES el resto del año. Este film independiente estrenado en agosto del 2017 me ha estremecido emocionalmente. Son estas las obras de arte urbano que me reconcilian con el arte. Con la cultura marginal y social de en Estados Unidos. Nunca o/ a veces creo que no sé para que sirve, hasta que tengo la suerte de ver por casualidad una joya así.
La actuación de esta actriz  Danielle Macdonald es lo más sublime que he visto en años. El rap que se canta en este peli debería ser obligatorio. No son versos es poética de los barrios marginales.
Una camarera blanca,  rubia marginal de familia desestructurada eacribe y rapea como los Angeles. Se pasa sirviendo copas y escribiendo letras en la barra que luego canta con su amigo también rapero dependiente de una farmacia.
Marginalidad, y creatividad van de la mano aquí y ella se afferra a su creatividad para vomitar sus letras.
Excelente peli. 

Mi problema es que ya estoy enamorado de esa mujer y jamás voy a encontrar algo así en Barcelona, vida cruel.