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lunes, 19 de noviembre de 2018

La silla del General cubano Antonio Maceo se va a Cuba por dos años.

"El ayuntamiento de Palma ha cedido de forma temporal la silla de Maceo para que pueda ser expuesta durante dos años en el Museo de Historia de La Habana. El traslado cuenta con la autorización del Ministerio de Cultura y con la colaboración del Ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, que se ha encargado del seguro, la custodia y el transporte de la pieza."

Será el presidente del gobierno socialista  Pedro Sanchéz, quien viajará este jueves con ella en el avión hacia La Habana. No dudo del entusiasmo habanero con la silla de Antonio Maceo, quizás el Mambí más venerado por los cubanos blancos, negros y mulatos. Los cojones de Maceo, son una referencia de valentía y cubanía en el habla popular cubana... " tienes más cojones que Antonio Maceo," el titán de bronce.

"Cabe recordar que la silla de Maceo perteneció al general del Ejército cubano Antonio Maceo, uno de los líderes de la guerra independentista. La pieza histórica llego a Mallorca de la mano del general Valeriano Weyler que la trajo como botín de guerraLa silla de Maceo, que está tallada en un tronco de palmera, estaba entre los bienes de los herederos del general Weyler, que en 1931 la cedieron al ayuntamiento de Palma. Actualmente se exhibía en el Castell de Bellver."

Ahora si es tan claro que el general Weyler, a quien Guillermo Cabrera Infante con toda razón, le adjudica la creación de 1er campo de concentración de la historia occidental, que mató de hambre y miseria a miles de cubanos en su " reconcentración," de 1897 para que el pueblo no ayudara a los mambises, no entiendo:  ¿por qué no es una devolución de algo que pertenece a la historia de Cuba, y a un militar cubano? En cambio, sea un préstamo por dos años.
¿España reclama cada pedazo de oro en forma de moneda que se encuentre en la trayectoria de Cuba a España? ¿A qué viene tener un trozo de palma hecho silla cuyo valor sentimental es solo cubano?


Nota

El historiador Raúl Izquierdo Canosa, autor de valiosas investigaciones sobre esta etapa Reconcentración de Valeriano Weyler en la  lucha del pueblo cubano, relata:

Cuando en los difíciles días de 1897 el alcalde municipal de Guines visitó a Weyler para exponerle las terribles condiciones en que se encontraban los reconcentrados en esa villa y solicitarle algunas raciones para impedir que continuaran muriendo de hambre, éste le respondió: "¿Dice usted que los reconcentrados mueren de hambre?" Pues precisamente para eso hice la reconcentración.