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viernes, 24 de agosto de 2018

Francisco Franco y el Juez Llarena corren la misma suerte la misma semana. Con el culo y las cenizas al aire.



Parece ser que los restos del asesino y dictador Francisco Franco, serán por fin cenizas, tras 40 años siendo, más que cenizas un monumento homenaje a su dictadura, El Valle de los Caídos, de un mal gusto arquitectónico que da asco.
Aún recuerdo cuando un amigo me llevó a ver el Escorial, y de retorno intentó que yo entrara al Valle de los Caídos, y yo me negué. 
Ya había hecho  lo mismo en París cuando visité los Inválidos, cuando pasé por el edifició donde está enterrado Napoleón, me negué a entrar. Y tras más de 15 viajes a París jamás he visto su tumba ni me interesa, y conozco tres cementerios de París y a sus ilustres cenizas artisticas jamás militares.
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El absurdo es que este amigo de Hitler, Franco, está enterrado en un lugar donde dicen se homenajea a las víctimas de una  guerra, cuando él murió en una cama de viejo, y forrao en expropiaciones de sitios públicos, dejando a su familia como dioses.
Extraña coincidencia entre sacar las cenizas de Franco al viento, el mismo día que el Gobierno anuncia que no defendera al  Juez Pablo  Llarena que enjuicia a Carles  Puigdemont y exconselleres,  y estos le han enjuiciado en Bélgica por hablar más de la cuenta sobre Puigdemont y el Procés en eventos y lugares donde no venía a cuento.

"El Ministerio de Justicia no pagará «en ningún caso» la defensa del magistrado del Tribunal Supremo «por los actos privados que se le atribuyen». Así lo especificó ayer el departamento, que encabeza Dolores Delgado, después de que el expresidente catalán, Carles Puigdemont y cuatro de sus exconsellers se refieran en su demanda a las manifestaciones que Llarena habría realizado tras asistir a una conferencia en Oviedo el pasado mes de febrero. Ante una pregunta, afirmó que Oriol Junqueras y el resto de miembros del Govern en prisión «no son presos políticos» PERIODICO ABC. 20.08.2018.

Yo personalmente y desde Catalunya,  tengo mis reservas con presidente Pedro Sánchez, pero tengo que admirar que ha hecho dos movimientos impensables hace solo dos meses con Rajoy en la Moncloa;  promover sacar las cenizas de Franco del Valle de Los Caídos, dejando retratados al PP y Cs (a mi no me hacía falta ya sabía de sus ADN franquistas, de ambos)  que se oponen ha esto dejándoles en evidencia ultraderecha muy clara. 
Y da un toque muy serio al juez Pablo Llarena advirtiéndole que una cosa es el proceso de enjuiciamiento del Procés con Rajoy, y otra con él. No olvidar, que ya acercó a los Jordis y a los exconceller (era lo lógico pero con Rajoy jamás hubiese ocurrido)  y ahora deja muy mal parado a Llarena. No lo digo yo, lo dicen los jueces del TS.

"Jueces del TS acusan al Gobierno de dejar "vendido" a Llarena y de "caer en la estrategia" de los acusados del procés." El nacional.

Tampoco hay que obviar que Carles  Puigdemont, que muchos  periodistas tertulianos amamantados de derecha tildan de inepto. Hoy sigue libre. Ha expandido el Procés por toda Europa,  y ha logrado que Bélgica siente en el banquillo al juez Llarena por extralimitarse en ir de sobrao hablando del independentismo.  Va acumulando victorias y ahora hasta un partido belga lo quiere de eurodiputado.