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jueves, 7 de agosto de 2014

Silvio Rodríguez retrata su deseo: Cristiana Robaina Márquez.

Silvio Rodríguez retrata Cristiana Robaina Márquez, 1982.


El filósofo Plotino dejó escrita una frase histórica en el siglo I: "existir es ser retratado." Si además, quien te hace una foto es un personaje que con el paso del tiempo es una figura universal en lengua hispana por sus canciones, su recuerdo se y te engrandece el pasado y la memoria que sigue cautiva en una isla que abandonaste.
Cristiana Robaina es una rubia natural nacida en el Caribe, propiamente en la barriada del Vedado, muy cerca de donde nací, a pocas calles de donde vivía Silvio Rodríguez cuando decidió abandonar su natal San Antonio de los Baños. En el momento de esta foto, 1982, el cantautor cubano tenía una explosión de popularidad con su canción el Unicornio Azul, que muchos pensamos estaba inspirada en John Lennon, asesinado dos años antes. 
Cristiana no fue una seguidora a quien Silvio Rodríguez pilló en un concierto; ella iba al mercado de 24 y 15 en el Vedado a comprar viandas y otras hortalizas, cuando Silvio yendo con su niña pequeña Violeta, descubrió a esta rubia con su cabello plateado en un país negro y mulato. Retrasó el paso para contemplarla, para poder mirar su nuevo deseo...
Su madre, ex bailarina del Ballet Nacional estuvo casada con el pintor Jose Masiques, a quien Silvio había escrito una canción "El pintor de las mujeres soles"; él supo este dia que Cristiana era hijastra del malogrado artista muerto muy joven con gran futuro y talento. 
Su familia no veia con agrado sus citas  a altas horas de la noche con semejante joya de la canción cubana . Ella -a pesar de las advertencias- disfrutó como nadie de la intimidad de un creador. 
Quienes padecemos el deseo de musas no queremos nunca que ese instante de impacto se apague. Para evitar el reproche familiar abandonaba su piso al amanecer, sin perturbar su sueño. En tiempos de unicornios, Silvio cantaba en privado "Mi lecho esta tendido", cuyas dos versiones fueron incluidas en Triptico (volumen 1 y 3), albums grabados en 1984.  Cristiana tuvo encuentros, fotos y sobre todo noches interminables de música, libros y anécdotas sobre viajes y un mundo que no podía imaginar desde su pequeño barrio del Vedado. Él le mostró música brasileña que ella no conocia y especialmente curiosidades sobre la composicion de Chico Buarque, eso después de las doce de la noche en La Habana, es inolvidable. Ella podrá presumir que tuvo su Marco Polo personal hoy convertido en nostalgia.
Silvio Rodríguez es una figura universal como cantautor y un referente para muchos compositores de lengua hispana, explicar su trayectoria es casi inútil por ser tan conocida; su lado oscuro es seguir apoyando a los Castro. 
No obstante, para una joven en los años ochenta era un espaldarazo que Silvio Rodríguez, con las canciones que tenia escritas y su popularidad, estuviera atraído  por ella. Quien lo niegue, miente aunque debo confesar que Cristiana era lo suficientente atractiva como para no necesitarlo. 
Los escritores nos salvamos con el desencanto de la sociedad por la iglesia católica. Ya pocos se confiesan con los curas. Se recurre a los amigos para contar historias personales. Precisamente Cristiana, con nombre religioso, amiga entrañable, me confió un romance que yo he relatado después de convencerla para ilustrar una foto, una cita con el pasado, como la película que ambos vieron juntos una de sus noches de ensueño, quise decir, encuentros.


Discografía de Silvio cuando conoció a Cristiana y Posterior a su relación.

UNICORNIO (1982) 

Por quien merece amor 

La gaviota 

Son desangrando 

Pioneros 
Hoy mi deber era 
La primera mentira 
Canción urgente para Nicaragua 
El sol no da de beber 
La maza 
Unicornio 

TRÍPTICO. Volumen I (1984) 

Me veo claramente 

Domingo rojo 

Nuestro tema 

El tren blindado 
Mi lecho está tendido 
Camino a Camagüey