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domingo, 16 de diciembre de 2018

Casado y Rivera hacen el ridículo. Siempre es la impaciencia por ganar lo que te hace perder. El 21-D no hubo Apokalipsis en Barcelona. Feliz Navidad.

Barcelona no ha ardido. Barcelona no está en llamas. Enric Juliana. 22 de dic. 

En las escuelas de periodismo del futuro, se podrá estudiar cómo alimentando una fake news, puedes crear una alerta nacional sin precedentes, y hacer que el ejecutivo envie tropas y policias por valor de un millón de euros, según la prensa, para una debacle en Barcelona que no ocurrió. Una muestra de exageración del relato político virtual, muy lejos de la realidad. Quizás para hacer olvidar que hace un año después de aplicado el art. 155, Catalunya votó gobierno independentista en el Parlament, esa herida escuece aún en el unionismo español. Hubo un tsunami real prenavideño, pero en Indonesia un día después, el 22 de diciembre.
Nunca dos políticos de derecha Pablo Casado y Albert Rivera, PP y Cs se les ha visto tan nerviosos y desesperados para lograr que estallara una bomba social en Barcelona el 21 de diciembre, con el 'advenimiento' del Consejo de Ministros a Barcelona encabezado por Pedro Sánchez. 
Llevan calentado el terreno desde que Sánchez tomó la presidencia. En la mesa del congreso donde tienen mayoría ambos han bloqueado 37 leyes. Y por la cámara Alta donde el PP es mayoría no pasa ninguna iniciativa. Bloquean todo lo que pueden para hacer reventar el gobierno. 
Su deseo de hacer explotar la legislatura socialista apoyados por algunas encuestas que le dan mayoría a la derecha y ultraderecha para gobernar el país, su repertorio de improperios al presidente del Gobierno Pedro Sánchez, solo es comparable a cuando J. Rodríguez Zapatero se reunió con ETA.  En aquella ocasión Zapatero apostó por el dialogo y ganó. No sé qué pasarà pero Sánchez resiste y eso les deja con 'cara de culo y sumidos en el extremismo político. Ya el PSOE es cómplice de ETA, y cómplice de los independentistas catalanes. El colmo. El PSOE que yo no voto, acabó con ETA y aplicó el 155 con Rajoy hace un año. Pero los 'Casados', Casados y Rivera intentan distorsionar la realidad y cambiar el relato para que un electorado caspa facha fuera de Catalunya les vote. Y ya les resultó en Andalucía.
Para Casado y Rivera que Sánchez tenga al menos aprobados los presupuestos con los independentistas del PDECAT y  Esquerra sería letal, en su estrategia de elecciones ya, por eso desean a toda costa reventar como pueden todos los puentes de diálogo con su falcistoide verborrea. Decir que Sánchez es un traidor y aplicó con ellos el 155 aquí en Catalunya no solo el falso, sino una burla burda a la inteligencia.
Es puro cinismo estar desesperados porque los independentistas asumieran el caos de los 'chalecos amarillos' en Francia, que por cierto, han logrado que Macron se baje del todo los pantalones como debe ser,  escuchando las demandas de su pueblo en las calles, y ellos, ambos le adoran, a éste francés no le dicen traidor, ni cobarde por doblegarse a las demandas, y retirar los impuestos a los carburantes y subir el salario mínimo.
El 21-D. Sánchez y Torra  hablaron, seguramente de presupuesto y de bajar las espadas,  y creo que funcionó, pues salvo los "antisistemas" que no son indepes no pasó nada grave. Las manisfestación independentistas convocada por ANC  y Omniúm fue como siempre, pacífica y cívica con 0 incidentes. Los cortes de carretera que hubo en la mañana tuvieron como en toda europa el amparo de la constitución vigente que avala la protesta. Sean de CDR, de Taxistas, de trabajadores agrícolas o de quien sea. Algo que Casado y Rivera, ese duo griego de furias, olvida.
El Consejo de Ministros acordó en Barcelona medidas de calado social: salario mínimo, 900€, violencia machista y en  simbólico anular el juicio de Companys, y poner al Aeropuerto del Prat Josep Tarradellas.
La patronal catalana reunió a ambas partes en un acto multitudinario. Los presos políticos  abandonaron la huelga de hambre. Y Esquerra y el PDECat depusieron su rechazo a negociar los Presupuestos del Estado.
Sánchez hizo lo contrario de Rajoy hace un año, no solo no vino el 1-O, sino que se escondió cuando el independentismo ganó las elecciones en 21- del 2017. A Pedro Sánchez no le asusta el riesgo, es un sobreviviente nato de los propios cuchillos de los varones y sultanas de su propio partido.  No le asustan ni Casado ni Rivera y aceptó el envite  de venir a pesar de las furias e inflamas de terror del fin de Barcelona y que no vea al diablo Torra pues se quemará en el infierno. 
Por ahora  le ha ganado la mano del 21-D. Ahora le pedimos un paso más y que permita un referéndum del tipo que sea, pactado con el Estado,  a ver en que sitio estamos. No es difícil y ningún demócrata debería temer a las urnas. 
FELIZ NAVIDAD.

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