No sabía que iba aparecer con pamela. Era de noche e invierno en Europa.

Es evidente que quería impactar.
No llevaba abrigo a pesar del invierno. Sí, cuello alto blanco y pamela. Botas casi a media pierna y un andar con gracia buscando el mejor ritmo en el movimiento de sus cabellos. 

Yo estaba con el móvil y el ipad y parecía tan moderno, ese yo blogger que soy con aires de escritor a punto o pasado... 

Cuando la pamela entró al restauran etiope de Grácia, saqué un poema-postal, que tenía  dentro de un libro que llevaba, "Áfricanía de la música Folclórica de Cuba," de Fernando Ortiz .. leí en voz alta:

"¡RECIBE EN NOMBRE DE TU PARTIDO 

UN SALUDO REVOLUCIONARIO

AL COMENZAR EL QUINTO AÑO

DE LA ECONOMÍA.

PATRIA O MUERTE VENCEREMOS.

COMITÉ PROVINCIAL DEL P.U.R.S.C. DE LA HABANA. 1964!"

Ella comenzó a reír de tal manera que se le cayó la pamela color marrón y todo el cabello parecía que tenía vida propia como algunas olas del mediterráneo cuando caen en tierra firme de la Costa Brava... Le dije...

-¡Perdona!, no sabía cómo felicitarte por el nuevo año... 

Dos parejas de una mesa del restauran comenzaron aplaudir... 

Yo me incliné como un actor al final de una obra. 

Sólo fue el comienzo...

Ella,  al final de la noche me dijo: Sí me dices que venga a vivir a tu casa ahora, recojo y me marcho... 

Pensé, no estoy preparado para tanta luz.
Le dije: Deja que el futuro haga sus deberes "la noche nos impone su tarea mágica de destejer el universo..."
Ya sé, lector que quizás sepas que el verso final es de Borges, pero hablo así cuando hay luna, medio en prosa, medio en verso.
Soy así, los autores buenos brotan...